miércoles, 25 de noviembre de 2020

no majsewal tajtol nawat. (mi Lengua Nahuat)

Probablemente, cuando lean este titulo, se generen distintos pensamientos. Náhuat? Idioma?
Un idioma cuenta con una estructura gramatical como base fundamental, tiene literatura, y debe ser declarado como lengua oficial en un determinado territorio. ¿Qué características le hacen falta a nuestra lengua materna para ser considerado un idioma. Ninguna.
Nací en Hueyapan, Puebla, un pueblo originario con una identidad especifica derivado de su lengua náhuat y su cultura. Han pasado 500 años desde que se interrumpió el desarrollo natural de este lenguaje, sin embargo, aquí sigue, lo podemos escuchar en cualquiera de las localidades de este hermoso municipio, a pesar de que se sigue utilizando, está condenado a su extinción. En este 2020 comprendí que de escribirlo perpetuaremos su existencia.
Para escribirla utilizaremos el alfabeto latino o romano, tal como lo hacen otros idiomas del mundo, como el ingles, el portugués o el español, cabe mencionar, que esto no le resta validez al desarrollo lingüístico que se estaba generando en aquel periodo, cuando se dio el encuentro de dos continentes, que desconocían su existencia mutuamente.
Solo basta observar que nuestro Náhuat se encontraba en un proceso de construcción y desarrollo, el cual se puede comprobar al analizar pinturas, signos y símbolos mediante los cuales nuestros ancestros, nos trasmitieron información acerca de sus gobernantes, sus deidades, su organización política, social, religiosa o incluso de los ciclos del tiempo que utilizaban para guiarse en sus ritos o para la agricultura. Esta información lo encontramos en glifos, códices, mapas o calendarios que están a nuestra disposición.
Nuestro intercambio lingüístico comenzó desde el momento en que los recién llegados registraron en sus diarios lo que fueron observando o escuchando al llegar a nuestras tierras. Con ambas herramientas, -registros prehispánicos combinados con los registros en el alfabeto latino,- podemos restaurar nuestra lengua, que como describí anteriormente, fue interrumpida en su desarrollo.
Al adentrarnos en la investigación, análisis, organización, y la estructuración de nuestra lengua nos vamos a encontrar con que el México prehispánico estaba organizado social, política y culturalmente. De igual manera, vamos a encontrar y fortalecer nuestra identidad. Y no solamente eso, de paso vamos a encontrar todo el cúmulo de conocimientos que nuestros ancestros estaban desarrollando y enseñando a las nuevas generaciones. 
Aunado a todo lo anterior, el estudio y análisis de nuestra lengua materna nos orientará hacia un despertar de nuestras conciencias, ampliándonos los horizontes de nuestra realidad, además de que nos dará un enfoque en nuestra posición temporal y espacial.
Con acciones como éstas, colocaremos algunos pilares sobre las bases que nuestros ancestros ya estaban construyendo, pero sobre todo aseguramos la existencia del Náhuat junto con toda su cosmovisión. ¿Qué puede pasar mas adelante, no lo sabemos, sin embargo, ésta es una tarea que está en nuestras manos, éste es el momento mas idóneo para hacerlo. Ya aprendimos a leer y escribir, con eso es suficiente.
Es necesario mencionar, que no reniego de mi segunda lengua, el español, el cual conocí a los 11 años, que llegó, se instaló y sin duda se ha expandido a lo largo de nuestro territorio. Muy al contrario, estoy agradecido con él por mostrarme su abecedario, ya que con su apoyo, el objetivo se hace mucho más sencillo.
Ahora, la pregunta que sigue es ¿Cómo visualizo mi lengua materna? Por el momento escribirla y estructurarla, con ello, se tendrán las condiciones para su enseñanza, fomentándola. La tarea que le queda a las siguientes generaciones será el análisis de crear y establecer un alfabeto propio que configure totalmente nuestro idioma náhuat.
Mientras tanto, imagino una educación publica que contemple la enseñanza de los idiomas con un enfoque hacia el exterior, es decir, que los jóvenes continúen aprendiendo ingles, francés o chino en las escuelas. Sin embargo, se ponga una mayor énfasis en la enseñanza de las lenguas del interior, lo que significa, que los jóvenes aprendan no solo Náhuat, mas bien aprendan zapoteco, mixteco, totonaco o la lengua que se habla en su comunidad, bajo una sola premisa, hacer florecer a las personas desde donde nacen.
Para lograrlo es necesaria una educación publica que forme ingenieros, licenciados, médicos, o pedagogos que conozcan y puedan desarrollarse en su profesión donde nacieron, socializando en su lengua materna, manteniendo y fortaleciendo su identidad. Aplicando la ciencia adquirida en las universidades en el desarrollo de sus comunidades rurales.
Ya para terminar, ésta es una invitación a ti que hablas alguna lengua indígena, escríbela, haz todo lo que sea necesario para lograrlo, que en ello se nos vaya la vida. Vale la pena.